Somos una Familia Marista Global que hace honor a nuestro nombre con procesos de formación en las escuelas que potencian el aprender a ser (desarrollar la personalidad integral, la autonomía, el potencial) y el aprender a vivir juntos.[1] Utilizando los paradigmas de la ecología integral, los derechos humanos y la convivencia intercultural, queremos proporcionar caminos hacia las competencias socioemocionales y la conciencia crítica ambiental y social.
[1] El documento Marista sobre la Educación, Misión Educativa Marista, en el capítulo 6 sobre las escuelas, adoptó el Informe a la UNESCO de la Comisión Internacional para la Educación en el siglo XXI, La educación: El tesoro interior (1996). Estos son los pilares tercero y cuarto.