Las bolsitas de plástico se han popularizado para envasar los productos que consumimos en casa. Son ligeras, manejables, atractivas y resistentes.
Tanto fabricantes como consumidores las encuentran fáciles de almacenar y conservar. Pero son una gran amenaza para nuestro medioambiente. Por ejemplo, no son biodegradables y producen gases nocivos cuando se queman.
Los animales y los pájaros los confunden con comida y, cuando se los comen, su sistema digestivo se obstruye y mueren. Estas bolsitas nunca se descomponen y afectan negativamente a la fertilidad de la tierra. Esto reduce al mínimo el verdor de la tierra. Los gases nocivos que se producen al quemar estas bolsitas provocan graves enfermedades en el ser humano, como bronquitis, alergias, cáncer, etc.
A pesar de la crisis sociopolítica que sacude las regiones noroeste y suroeste de Camerún, el club de ciencias medioambientales del colegio Saint Pius X de Tatum ha puesto en marcha un programa de reciclaje de plásticos en el que los alumnos reciben formación sobre técnicas respetuosas con el medioambiente para convertir estas bolsas en productos reutilizables, como bolsas de mano, cestas, carteras, adornos, etc.
Esta iniciativa se ampliará con el tiempo a otras instituciones y a la comunidad de Tatum en su conjunto. Con ello habremos respondido a la llamada de nuestro Creador conservando, protegiendo y restaurando nuestro medioambiente.
Lenaka Verla Karim: Science teacher at Saint Pius X School Tatum